Tienes que saber dónde te metes porque esta ocasión de un Saabaru, el apodo del Saab 9-2X, es única sólo si la entiendes.
Desarrollar un coche es caro. Una forma algo más fácil de sacar un coche al mercado de forma barata es compartir el desarrollo con otras marcas. Desarrollar juntos una plataforma, por ejemplo. Una versión extrema es el rebadge. Un mismo modelo es comercializado dos veces por dos marcas. Por lo general, con un distintivo diferente y, a menudo, con un diseño ligeramente distinto a nivel de detalle. ¿Buscas coches segunda mano en España? Encuentra tu próximo coche en Crestanevada.
Insignias Saab
En realidad, esto sólo ocurre cuando los fabricantes se encuentran en una situación financiera desesperada. De hecho, a menudo tiende hacia una especie de desesperación. En este caso por parte de Saab. Junto con GM, consiguieron retrasar su desesperación financiera hasta 2011. GM habría preferido que Saab simplemente pegara su insignia en un producto estándar de GM, que es lo que ocurrió con el 9-7X, por ejemplo. Aquello era un Chevrolet Trailblazer con morro de Saab, no había nada sueco en el V8 de 5,3 litros que llevaba delante.
Saab 9-2X
Y luego estaba el 9-2X. Ahí la cosa fue aún peor. De hecho, GM también estaba a cargo en gran medida de Subaru en ese momento, y Saab sólo tuvo que comercializar su camioneta Impreza prácticamente sin cambios. Ese se convirtió en el Saab 9-2X, popularmente conocido como «Saabaru». Aparte de la nariz, definitivamente no era un Saab. El motor era el bóxer de 2,5 litros que Subaru tenía en su Impreza Wagon (GG). Con eso, el 9-2X tenía un buen motor y las mismas características de conducción, aunque no se debe esperar que el manejo sea «des Saabs». El Saabaru se sale con la suya, sin embargo, porque usted podría hacer mucho, mucho peor que un Impreza en términos de conducción.
Ocasión Saabaru
Puede que nunca hayas oído hablar del Saabaru porque el Saab 9-2X no estaba pensado para nosotros. De hecho, estaba destinado principalmente a EE.UU., donde se vendió en buenas cantidades. En los Países Bajos se podía comprar un Subaru Impreza Wagon, pero no un 9-2X. ¿Se echa mucho de menos? No, a no ser que te guste más el morro de Saab (y gracias al aspecto algo torpe del Impreza, más o menos).
De ahí que la ocasión que nos brinda hoy el Saab 9-2X sea especial. Según el RDW, sólo hay dos circulando por ahí y como son gris y azul, creemos que éste es el tercero. Eso probablemente significa que todavía tienes que pasar por el proceso de importación tú mismo. No sólo es incómodo, sino que además no es gratis. Y ahí empieza la razón por la que el Saabaru no es necesariamente una elección racional.
Porque tampoco es precisamente nuevo. El motor parece funcionar bien, pero ha recorrido 244.344 kilómetros. El exterior no está en condiciones de concours e incluso falta un panel de la tapa del maletero. No sería ninguna vergüenza, si no fuera porque el vendedor pide 6.995 euros por él. Se puede conseguir un Subaru Impreza en condiciones similares por la mitad. Es una compra más inteligente.
Por otra parte, un Impreza es menos único. Así que el Saab 9-2X ocasión es para el conocedor. Que todavía quiere reformarlo un poco. Divertido es, sensible no lo es. De todas formas, puedes comprarlo al vendedor en Marktplaats y nunca sabes si volverás a tener esa oportunidad. Eso lo hace emocionante.